Una vez más lo vuelve a intentar.


Una vez más lo vuelve a intentar.

El corazón es frágil y un tanto testarudo a la hora de amar. Es difícil conectar la ilusión con la razón, es imprudente dejarse llevar sólo por la pasión. A pesar de las caídas y las traiciones, de la hipocresía y las lamentaciones, el corazón se aferra a amar, una vez más lo vuelve a intentar. 

No es de tontos enamorarse, es una necesidad que al final de cuentas depende de la decisión de dejarse llevar. Es necesario pensar y tener en claro que es lo que buscamos; conocernos, respetarnos y amarnos debe ser el primer paso. Amar es de valientes; el corazón siempre está listo para empezar, decide creer, decide volar, decide soñar, una vez más lo vuelve a intentar.


Las dificultades y las pruebas son las que nos ayudan a descubrir nuestras fortalezas. Creer que en todo momento las cosas serán perfectas, es como pensar que la noche es eterna. En su tiempo el árbol deja caer una flor, el error siempre deja una lección. Es importante entender que es lo que sucede realmente, a veces es tan claro y obvio el panorama pero el corazón disfruta contradecir a la razón. 

El corazón siempre cree que todo puede cambiar; siempre está al alba, un tanto inmaduro, un tanto inocente, a veces inseguro, a veces temeroso, pero siempre listo para empezar, una vez más lo vuelve a intentar. 


Vivir sólo de sueños e ilusiones es el peor daño que podemos hacernos. Cambiar para agradar, cambiar para gustar, cambiar para atrapar, tan sólo nos lleva a mendigar. El problema no es que las personas jueguen con nosotros, el problema es el cuento que creamos dentro, justo en el fondo. Es importante reaccionar antes de arruinarlo todo, la obsesión trae consigo celos, inseguridades y miedos, cuando menos lo esperamos la posesión lo carcome todo. 

Una sonrisa, una mirada, un amable trato no siempre significa amor, muchas veces tan sólo es cortesía, una falsa nube de ilusión. Es importante estar alertas a lo que dice la razón, tal vez es más fría pero siempre nos lleva a encontrar una solución. Al final de cuentas, pase lo que pase, el corazón siempre saca fuerzas, resurge de las cenizas y vuelve a empezar, vuelve a amar, una vez más lo vuelve a intentar.


By: IsraMerKdo 

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